

“La libertad, es la libertad de aquél que piensa distinto.” Rosa Luxemburg.
“Si la libertad significa algo es el derecho de decir a los demás lo que no quieren oír.” George Orwell.
Como se puede comprobar, las últimas lecturas aquí en Kamchatka siguen enredadas en el peliagudo tema de la libertad. ¿Resulta curioso, verdad?, precisamente ahora cuando todo el mundo tiene perfectamente asumido que vivimos o viven en un país libre (sí hasta los milicos hondureños, nadie se priva). Quizás por eso resulta más urgente recordar las palabras y el pensamiento de los dos resistentes que encabezan esta entrada.
Del segundo podemos rescatar hoy su afán de búsqueda de la verdad a contracorriente. Siempre desde una posición minoritaria y enfrentada no sólo a las clases dirigentes de su tiempo sino a las tendencias mayoritarias de los movimientos revolucionarios de su época fascinadas por el estalinismo. ¿Sabíais que su inmortal Rebelión en la granja pasó de editorial a editorial progresista sin publicarse porque no era políticamente correcta?
De la primera da cuenta su propia vida. Mujer, revolucionaria de una revolución traicionada por la socialdemocracia de su país (¿qué raro no?), perseguida, encarcelada... Y aún así contraria a cualquier tipo de totalitarismo, aunque éste proviniera de un proceso revolucionario tan cercano a sus propias ideas como el soviético.
Muchas vueltas ha dado el mundo desde entonces, o quizás no tantas, pero aquí en Kamchatka nos preguntamos cómo hay que enjuiciar el mundo en el que vivimos a la luz de estos ejemplos. Qué pensar de la actual ley de partidos española, o del Estado pseudofascista que campa por sus respetos en Italia, de la directiva de la vergüenza en la Unión Europea, de los centros de internamiento de extranjeros en nuestro país, del apaleamiento de estudiantes en la Cataluña del tripartito, de la violencia empresarial de los despidos masivos...
Pero además de pensar, también habría que plantearse qué hacer. Porque aquí y ahora, con urgencia, es fundamental organizarse y luchar por la libertad. Por la libertad de los que pensamos o piensan distinto, por la libertad que se basa en el derecho inalienable de decirle a los demás lo que no quieren oír.
Por lo pronto, en Kamchatka, estamos dispuestos/as a luchar y morir por ello.